Pronto vuelve nuestro Señor. Esta es nuestra esperanza, pronto el dolor se acabará y Él con poder someterá a todos sus enemigos debajo de sus pies, y el cielo y tierra nueva que nos prometió, nos lo dará. Ciertamente si no volviera ¿Qué sería de la tierra? ¿Qué sería de nosotros? ¿Qué razón habría para vivir y seguir??.
Claro que vuelve, vuelve por su iglesia, vuelve por los que con amor decidimos seguirlo y creerle, amarle, sabiendo que no hay otro Nombre dado a los hombres más que Cristo nuestro Señor, él es el único camino al Padre, y el único en el que podemos ser salvos.
¿Qué hacer mientras él vuelve?
Crecer a la estatura de Cristo, fortalecernos en su amor para ser mejores cada día con su ayuda, soportándonos unos a otros, ayudándonos unos a otros, amándonos unos a otros. Evangelizando y contando a los demás de la grandeza de su Infinito Amor; ya que aun nosotros "siendo aun pecadores Cristo murió por nosotros", y si no ha regresado, no es por tardanza, sino que él no quiere que ninguno se pierda, sino que todos sean salvos en su Nombre. Siendo gentiles, no parte de la herencia del pueblo de Dios (Israel), en Cristo fuimos unidos, y ya no hay Judío, libre, ni esclavo, romano o colombiano, blanco o negro, sino que en Cristo somos parte de la misma familia de Dios, parte del pueblo de Dios, real sacerdocio, nación santa, creada para glorificar su Santo Nombre por la Eternidad.
Los invito a leer en la Sagrada Biblia:
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